Los restos permanecieron con un sorprendente grado de preservación durante 37 mil años.
Para realizar el hallazgo, los autores estudiaron la Chromosphera perkinsii, un organismo unicelular encontrado en sedimentos marinos en Hawái en 2017 y que ha estado presente en la Tierra desde hace más de mil millones de años, mucho antes de que aparecieran los primeros animales, que son siempre pluricelulares.
El comportamiento errático del dodo no tiene la suficiente evidencia, ya que, aunque existen numerosos dibujos, la gran mayoría se copiaron de otros anteriores o de ejemplares disecados.
Hoy día este tema sigue abierto, a tal punto que la comunidad científica todavía trabaja para aclararlo.
La información recopilada hasta ahora indica que pudieron surgir hace unos 800 millones de años, vivieron en los océanos y físicamente se parecían a las esponjas marinas.
Situación que ha beneficiado a Antonio Villagómez, comerciante que ha dedicado un espacio para la venta y exhibición de especies como tarántulas, escorpiones y camaleones, siendo algunos de los más populares entre la gente.
Entre la salinidad y las inundaciones, cientos de ejemplares pierden la vida o resultan gravemente afectados cada año por este motivo.
La organización conservacionista internacional culpa de esta situación a los efectos del cambio climático; las especies invasoras; y las actividades humanas, como el comercio ilegal y la expansión de infraestructura.
Los investigadores de la institución mexicana detallaron que para este estudio analizaron dos especies de abejas nativas que producen miel en su estómago: Scaptotrigona mexicana y Scaptotrigona pectoralis.
