Cartón y carrizo volaron en punto del mediodía de este Sábado de Gloria en la Plaza de los Mártires luego de que, como lo marca la tradición, Judas ardiera por su traición, 30 veces los estallidos y la música llenaron de emoción a los más de 2 mil espectadores, la tradición fue cumplida al pie de la letra.
Durante más de tres horas, los toluqueños pudieron admirar los Judas monumentales que participaron en la XXVI edición del concurso que creo el ya extinto artista Luis Nishizawa para fomentar el arte de la pirotecnia en la ciudad.
Este año, para el concurso llegaron más de 150 piezas al Museo del Alfeñique, que sirvió como anfitrión debido a la remodelación del Museo Taller Luis Nishizawa, en las que predominaban dos temas: El huachicoleo y el Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Del total de piezas participantes, 30 fueron quemadas en medio de un operativo del Ejército, Protección Civil y Bomberos, así como la Dirección de Seguridad Ciudadana de Toluca, quienes acordonaron la plaza cívica para evitar que se diera algún incidente con la pirotecnia.
Durante la quema, los niños disfrutaron jugando con los restos de las gigantescas obras de cartonería, aprovechaban las familias para tomarse una foto con los Judas que aguardaban el momento de ser quemados.
"Es un espectáculo muy padre, lleno de tradiciones, no me lo pierdo, llego desde las 10:00 por lo regular para apartar lugar, porque se llena de gente, incluso hay quienes se ponen en Palacio de Gobierno, en el Ayuntamiento, todos quieren ver el espectáculo de luces y tronidos, es como si la pólvora animara a la ciudadanía", comentó Renato.
La quema de los 30 judas monumentales transcurrió sin incidente alguno, y cumpliendo el objetivo de hacer añicos al traidor de Judas Iscariote.
