Tras el cambio a semáforo amarillo, el sector restaurantero prevee una baja en sus ventas del 15 por ciento, principalmente los fines de semana, días en los que registraban mayor aforo de personas en sus establecimientos, informo Mauricio Massud, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados en el Estado de México.
"Sin duda alguna si esperamos un poquito de contracción en cuestión de la confianza de los clientes para salir a comer, el hecho de que digan amarillo, hará que muchas gentes piensen dos veces el salir sobre todo, el fin de semana".
Las reglas de operación que hasta el momento aplican los restauranteros son:
- Capacidad del 70% al interior y exterior del establecimiento
- Mesas segura
- Equipo de trabajo protegido
- Horarios hasta las 12 de la noche
- Funcionamiento de áreas de fumar y de niños
El representante de la CANIRAC, detalló que el impacto no se vera reflejado de lunes a viernes por el contrario mantendrán el número normal de comensales.
Finalmente, comentó que durante el período vacacional, la afluencia de personas baja, ya que buscan salir a desayunar o comer algún lugar turístico como es Malinalco, Tonatico o Valle de Bravo.
"Durante la temporada vacacional historicamente nos representaba una baja en el sector, porque normalmente la gente sale a lugares cercanos del Valle de Toluca, otros prefieren las playas en esta época de verano y si tiende a disminuir un poquito la actividad en cuestiones de comida"
Se espera que después de la primera quincena de septiembre puedan reactivarse de nueva cuenta y lograr un repunte en su economía.