Agotamiento y bajas dramáticas en las defensas están entre los síntomas más graves de la denominada retrovirus koala, una nueva enfermedad que está amenazando gravemente a la especie endémica de Australia.
El padecimiento se transmite de las madres a sus crías. El problema es que, además de debilitar el sistema inmune de las hembras embarazadas, también genera estragos letales en los bebés recién nacidos. Por esta razón, algunos científicos han comparado al retrovirus koala con el virus de la inmunodeficiencia humana, mejor conocido como VIH.
El contagio, según los científicos, se da por la proximidad entre la madre y su descendencia, la clave podría estar en los fluidos infecciosos como la leche materna.
Originalmente, los expertos pensaban que la transmisión era por la vía sexual; sin embargo, no existe evidencia suficiente que les lleve a confirmar dicha teoría. Lo que sí es una realidad es que los koalas del norte comparten una única versión altamente conservada de la enfermedad que está integrada en el genoma de la especie.
Hoy en día, han sido identificadas 421 secuencias del retrovirus de koala. Ante la incertidumbre de esta nueva enfermedad, los científicos veterinarios del país aseguran que encontrar rápido una cura cambiaría para bien el panorama, actualmente precario, para la conservación de la especie.