Un reciente estudio elaborado por expertos de la Universidad Konkuk, Corea del Sur, confirmó que las interacciones con perros no sólo fortalecen nuestro vínculo hacia ellos, sino que también generan un impacto positivo en la salud mental humana.
Durante la investigación, publicada en la revista PLOS ONE, el equipo de científicos analizó cómo ciertas actividades, entre ellas jugar, abrazar y pasear perros, pueden reducir significativamente los niveles de estrés de las personas. Incluso, los resultados mostraron que unos pocos minutos de contacto con esos peludos animales generan cambios positivos en el bienestar emocional.
Según describe el presente trabajo, que incluyó a 30 adultos, los participantes experimentaron mejoras notables en su estado emocional tras interactuar con los caninos por un periodo corto de tres minutos.
“Monitoreamos la actividad cerebral de los voluntarios mientras realizaban diferentes actividades con los perros. Tras ello, observamos una disminución en los niveles de cortisol, hormona asociada al estrés. De igual manera, detectamos un aumento en la liberación de oxitocina, conocida por muchos como la hormona de la felicidad, misma que suele fomentar sensaciones de calma y conexión emocional”, señaló Kwon Ji-yong, uno de los autores.
“Creemos que la conexión emocional que se establece con estas mascotas tiene un efecto directo en la mejora del estado de ánimo, así como en la reducción de sentimientos negativos. Esta situación las convierte en aliadas naturales para enfrentar los desafíos emocionales diarios”, concluyó.