Como parte de los proyectos Pago por Resultados y Restauración del Paisaje, los bosques amazónicos poco a poco están renaciendo en zonas específicas degradadas de Ecuador.
Prueba de ello es que durante los últimos meses ya se han restaurado 2 mil 300 hectáreas, las cuales servirán para frenar el cambio climático, proteger especies amenazadas y ofrecer nuevos medios de vida sostenibles a las comunidades indígenas que viven de ellas.

La presente iniciativa, liderada por el Ministerio ecuatoriano de Ambiente y Energía, que a su vez cuenta con el apoyo del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), se está realizando de manera simultánea en tres provincias distintas de la región amazónica de aquel país sudamericano.
Cedros, palmeras y guayacanes son algunas de las especies de árboles que están volviendo a crecer en Zamora Chinchipe, Pastaza y Morona Santiago.



