En la década de los años 80´s, el programa de televisión Star Trek: The Next Generation presentó a millones de personas la idea de una proyección holográfica 3D inmersiva y realista dentro de un entorno completo con el que se podía interactuar e incluso, tocar.
Hoy en día, los hologramas han evolucionado a tal punto de poder utilizarlos de diversas formas, como en sistemas médicos, educación, arte, seguridad y defensa. Y es que día con día, los científicos todavía se encuentran desarrollando diferentes maneras de usar los láseres, procesadores digitales modernos y tecnologías de detección de movimiento para crear diferentes tipos de hologramas, que podrían cambiar la forma en la que interactuamos actualmente.
Tal es el caso de un grupo de investigadores de detección y electrónica flexible de la Universidad de Glasgow, en Escocia, el cual ha desarrollado un sistema de hologramas denominado como “Aerohaptics”, creando sensaciones de contacto mediante corrientes de aire.
Dichas corrientes de aire brindan al usuario una sensación de tacto en los dedos, las manos y las muñecas.
“Con el tiempo, esta tecnología podría permitirle a las personas conocer al avatar virtual de un colega que se encuentra al otro lado del mundo y sentir realmente su apretón de manos. De hecho, este podría ser el primer paso para construir algo parecido a una “holocubierta” (instalación ficticia de realidad virtual que se encuentra en naves y bases estelares en el universo de la serie Star Trek”, señaló Mikey Johnston, líder del proyecto.
Para crear esta sensación de tacto, Johnston y sus colegas echaron mano de una serie de piezas asequibles comercialmente, para así combinar gráficos generados por computadora con corrientes de aire cuidadosamente dirigidas y controladas.
“De alguna manera, esto es un paso más allá de la generación actual de realidad virtual. Realmente estamos muy emocionados de lo que podemos llegar a conseguir si seguimos por este camino”, finalizó el experto.