Un nuevo estudio publicado en la revista Patterns reveló que en el transcurso de 2025, las emisiones de dióxido de carbono (CO2) provenientes de los centros de datos con inteligencia artificial (IA) alcanzaron niveles comparables a los de toda la ciudad de Nueva York.
Liderado por Alex de Vries-Gao, el presente análisis estima que la huella de carbono de los sistemas de IA podría llegar a 80 millones de toneladas para fin de año. Esta cifra equivale a las emisiones anuales de la apodada Gran Manzana y representa más del 8% de las emisiones globales del sector de la aviación.

Aunado a lo anterior, la investigación también expuso que el consumo de agua relacionado a dicha tecnología ya supera la demanda global de líquido embotellado, situación que pone de manifiesto su creciente impacto ambiental.
“Este fenómeno apenas comienza y la fiebre construcción de centros de datos impulsada por la IA generativa es sólo la punta del iceberg”, sentenció el autor.



