Debido a la facilidad para almacenarlas y practicidad para prepararlas, las sopas instantáneas se han convertido en uno de los alimentos más recurridos por los mexicanos. Sin embargo, recientemente, la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO) aseguró que estos productos no nutren a quienes los consumen, revelando a detalle de qué están hechos.
En la edición de agosto de la Revista del Consumidor, el organismo analizó estos alimentos e indicó que contienen hidratos de carbono, cantidades variables de grasas y proteínas, un aporte energético que va de las 29 a las 230 calorías por cada 100 gramos de producto, y otros aditivos como el polémico glutamato monosódico (GMS), una sal muy común entre los alimentos procesados.
“Estas sopas no te nutren y el sabor que aportan no es a base de vegetales, carne, pollo o camarón, sino de una serie de saborizantes artificiales que no son buenos para tu organismo. Las sopas elaboradas por ti son más nutritivas por los ingredientes que le añadas, como vegetales, cereales, crema o leche”, señala la PROFECO.
En el caso del glutamato monosódico, la dependencia federal indica que investigaciones han revelado que este ingrediente puede provocar problemas de salud, tales como dolor de cabeza, sofocación, taquicardia, sensación de presión en la cara, adormecimiento de la boca, dificultad para respirar, sudoración, dolor de pecho y debilidad general.
Por lo anterior, la PROFECO no descarta que algunas sopas instantáneas provoquen este tipo de molestias en sus consumidores.