La Legislatura mexiquense aprobó en comisiones la tipificación, como delito grave, los “cristalazos” y el robo de autopartes, con lo que quienes incurran en estas conductas deberán ser sujetos a prisión preventiva.
En el mismo supuesto serán considerados, una vez que el pleno lo ratifique, quienes roben equipaje de los autos, violenten mecanismos de geolocalización y/o roben algún vehículo estacionado, tanto particular como de transporte.
El diputado morenista Gerardo Ulloa, promotor de la iniciativa, destacó que el robo de vehículo en sus distintas modalidades y al transporte es uno de los principales de la entidad, pues en 2018 fue el primer lugar nacional con y sin violencia.
El Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública revela que el número total de unidades robadas, con y sin violencia, en el Estado de México superó los 47 mil 650 vehículos, tendencia que siguió en aumento para el 2019, y se mantuvo en el primer mes de este 2020.
La Fiscalía General de Justicia de la entidad refiere que solo en Toluca se inician diariamente entre 10 y 15 carpetas de investigación por robo al interior de vehículos estacionados, la mayoría por el clásico “cristalazo”. De esos casos, apenas en 4 ó 5 se logra detener a algún presunto responsable, pero la mayoría sale libre.
Ulloa Pérez advirtió que el robo de vehículos, autopartes y refacciones, regularmente está vinculado a otros ilícitos, dado que la mayoría de los secuestros y robos a negocios se realizan en unidades con reporte de robo.
“Hoy el delito de robo de vehículos estacionados en la vía pública no está considerado como un agravante en cuanto la comisión del mismo, esto permite que el sujeto activo en el robo quede en libertad de manera inmediata, lo que se convierte en factor de impunidad y favorece que el índice delictivo siga en aumento”, apuntó.
Su correligionaria Beatriz García recordó que la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre la Inseguridad Pública 2018 revela una prevalencia de 29 mil afectados por robo de vehículos por cada 100 mil habitantes, y México es el segundo país con mayor incidencia en América Latina, después de Brasil.
“Dado que el fenómeno de robo de automóviles y autopartes tiene un índice de recuperación muy baja, en autopartes es nulo, expresamos preocupación para la toma de acciones eficaces en el combate al robo de vehículo”, manifestó.
Su compañero de bancada Margarito González destacó que ésta modalidad de robo se ha incrementado de manera exponencial, y cuando los delincuentes logran ser detenidos, vuelven nuevamente a las calles y “aumentan la creencia de la ciudadanía que este sistema se ha convertido en una puerta giratoria”.
Al final, las Comisiones de Gobernación y Puntos Constitucionales, y de Procuración y Administración de Justicia aprobaron por unanimidad reformas al artículo 290 del Código Penal para que estas modalidades se consideren como agravantes, en busca de evitar la reincidencia, pues en la mayoría de los casos los delincuentes salen libres a las 48 horas.