Ante las afectaciones económicas que enfrentan las unidades económicas del Estado de México, derivadas de la emergencia sanitaria por COVID-19, el Consejo de Cámaras y Asociaciones Empresariales del Estado de México (Concaem) señaló que el cierre de año será complicado y prevé que sea uno de los peores en décadas.
Gilberto Sauza Martínez, presidente del Concaem, informó que la mayor parte de las empresas tendrán que hacer esfuerzos extraordinarios para el pago de aguinaldos, contemplando la venta de activos y cumplir con la ley. Recordó que las previsiones para el país son de un decrecimiento de entre 9.2 y 13% y la pérdida de más de 2 millones de empleos permanentes.
A pesar de que el sector privado, aseguró, ha hecho esfuerzos extraordinarios para mantener la salud y el cuidado de sus colaboradores, el cierre complejo ya vislumbrado podría empeorar de no controlarse la expansión de nuevos contagios. Por ello, el sector empresarial ha trabajado en campañas que orienten a la población sobre el respeto de las medidas de sana distancia, cuidado de la salud y respeto hacia las autoridades; sin embargo, durante las últimas semanas han observado que se han relajado estas aplicaciones, siendo el sector informal la principal fuente de riesgos.
“El tema de la informalidad sigue siendo uno de los principales lastres que enfrenta el sector económico, no sólo por la competencia desleal, sino porque ahora este se ha convertido en una bomba de tiempo en materia de contagios “, dijo.
Sauza Martínez hizo un llamado a redoblar esfuerzos entre la ciudadanía para evitar un repunte de nuevos casos de contagio, pues, dijo, un eventual retorno al semáforo rojo de riesgo epidemiológico representaría un golpe mortal para miles de unidades económicas.