El Congreso local solicitó la apertura controlada de panteones durante la conmemoración de Todos los Santos como una medida para compensar las pérdidas de los floricultores por la pandemia de COVID-19, estimadas en más de 500 millones de pesos.
La diputada morenista Violeta Nova, promotora del punto de acuerdo, planteó pedir a la Secretaría de Salud y a los 125 ayuntamientos del Estado de México la medida, pues la entidad es primer productor nacional de flores, seguido de Puebla y Morelos; e incluso exporta a países como Canadá, Estados Unidos, Reino Unido y Japón.
La producción de flores, indicó, genera 188 mil empleos directos y 50 mil eventuales, dependiendo de la temporada, y más de un millón de trabajos indirectos anualmente, de acuerdo con datos de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sagarpa); “sin embargo, en 2020 la actividad florícola se vio afectada debido a las medidas sanitarias implementadas para evitar la propagación del coronavirus que, a nivel mundial, ha causado estragos en varios sectores de producción. Sólo en el Estado de México se proyecta una pérdida de 500 millones de pesos”, estimó.
En Villa Guerrero, municipio mexiquense líder en esta actividad, refirió, aproximadamente 80% de las familias viven de sus ingresos por producción y venta de flores, y 70% en Coatepec Harinas, “pero ahora la producción se ha visto afectada, pues sólo trabajan dos o tres días a la semana y ya no obtienen ingresos”.
Nova Gómez recordó que uno de los mejores días de venta para los productores de flores es el de la celebración del Día de Muertos, por lo que el cierre de panteones debido a las medidas tomadas contra el SARS-CoV-2 afecta económicamente al sector. Por esta razón, el Pleno del Congreso aprobó por unanimidad de votos que la Secretaría de Salud, en coordinación con los municipios del Estado de México, implemente un programa emergente en los panteones que ayude a los productores de flores a comercializar su producto durante la época en que se celebra dicha festividad, implementando las medidas sanitarias pertinentes.
“El virus está presente y debemos adaptarnos a una nueva normalidad en donde encontremos un equilibrio entre las medidas de protección y las actividades cotidianas, a efectos de no detener el sistema económico de los hogares mexiquenses”, concluyó.