La Ley del Cuerpo de Bomberos del Estado de México es letra muerta a un año de su aprobación, pues los ayuntamiento arguyen insuficiencia de recursos para su implementación.
Por esta razón, su principal impulsor, el diputado Max Correa, apeló a que se destinen los presupuestos necesarios para garantizar el equipamiento, instalaciones, vehículos, capacitación, remuneraciones, prestaciones y dotación de condiciones para que la norma sea operante.
"Debemos hacer un esfuerzo conjunto para tratar de saldar la deuda histórica con los bomberos mexiquenses, afirmó, al considerar que se se está a tiempo de programar y aprobar los presupuestos del año próximo de manera que también se implemente esta normatividad.
Bajo estas consideraciones propuso al pleno cameral llamar al secretario general de Gobierno, Luis Felipe Puente, y a los 125 ayuntamientos a informar a la Legislatura sobre los avances de las acciones que han realizado para implementar las disposiciones de la Ley de Cuerpos de Bomberos del Estado de México.
La norma entró en vigor el 3 de septiembre de 2021, con el objetivo de dejar atrás los tiempos de la precariedad laboral que solo era compensada con apapachos sobre heroísmo y un fideicomiso populista que se publicó en decreto, pero no hay información de lo que sucedió con ese dinero.
La reforma obliga a destinar del presupuesto anual de cada uno de los 125 municipios mexiquenses lo necesario para contar con bases de bomberos dignas, con equipos de protección personal individual y de alta calidad, superando las escenas que son parte del anecdotario de los bomberos veteranos de la entidad que narran entregas de equipo en presencia del gobernador en turno y su despojo esa misma noche para utilizarlo en la siguiente ceremonia oficial de entrega en otro municipio.
Los retos, admitió, continúan siendo evidentes, pues de acuerdo con testimonios de los propios bomberos, la normatividad no está siendo implementada por los municipios, ante el argumento de que no hay recursos.
El también presidente de la Comisión de Asuntos Metropolitanos, señaló que municipios como Naucalpan, Atizapán de Zaragoza, Cuautitlán, Coacalco y Tlalnepantla de Baz, entre otros, aún presentan deficiencias, sobre todo en equipamiento, instalación y mejoramiento de estaciones, vehículos, mayor capacitación de personal, remuneraciones, prestaciones y dotación de condiciones para desempeñar dignamente esta labor.
Indicó que se estima que en el Estado de México laboran 3 mil 600 bomberos y bomberas en 74 de los 125 municipios, con un déficit de 14 mil 500 bomberos, si tomamos en cuenta que debe existir un bombero por cada mil habitantes. “No debemos perder de vista que los bomberos son los héroes humanos más reconocidos en el mundo, sus funciones no sólo son apagar incendios, también ayudar en desastres naturales como inundaciones y terremotos, rescates en accidentes carreteros, en las alturas, bajo los escombros y en fugas de gas, entre muchas otras tareas que son extremadamente difíciles y peligrosas”, agregó
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