Han pasado 15 días y la familia del señor Alejo Alvarado, poco sabe de su estado de salud después de que el pasado 27 de abril fuera ingresado al Hospital Adolfo López Mateos, en Toluca, por presentar dolor en el pecho, muscular y dificultad para respirar. Durante todos estos días el único dato que han obtenido es que ya fue entubado, sin embargo, no saben si es portador del Coronavirus.
"Cuando entró luego luego me lo recibieron, ya cuando llegamos aquí el ya no tenía fuerza en los pies, por ahí a medio camino nos vinieron encontrar con una silla de ruedas para meterlo, ya nada más ahorita no sabemos, ya está aislado, ya no sabemos qué tratamiento le están dando ahorita", comenta su esposa María de los Ángeles.
El señor Alejo se desempeñaba como taxista, todos los días realizaba viajes de la ciudad de México a Toluca, sin embargo, comenzó a sentirse mal.
"Nada más me dieron esta hojita para estarse comunicando a la extensión, porque por obvias razones no nos dejan entrar, he tratado de comunicarme pero no me responde nadie”, refiere Alejandro Alvarado, hijo del paciente.
Diariamente los familiares de don Alejo, realizan de seis a ocho llamadas a la línea habilitada para recibir informes de pacientes con COVID-19, pese a que no les han informado si ya dió positivo a la prueba.
"Entra la llamada me dice que si conoce la extensión que la marque y así pero no me contestan, me dejan en la línea y no sé nada del estado de mi papá".
Laureano Alvarado, hermano del paciente, hace un llamado al titular de la Secretaría de Salud del Estado de México, para agilizar la información del estado de salud de los familiares, ya que han pasado días y noches afuera de los hospitales sin saber nada.
"Lo que queremos es que nos digan si va a permanecer aquí o nos vamos y ya ellos que nos comuniquen que nos digan su paciente está bien y ya nos quitamos de este lugar, pero si no dan informes pues nos tenemos que quedar aquí".
Así como ellos, varias familias aguardan en la entrada del Hospital Adolfo López Mateos en espera de información que pueda reconfortar la angustia y miedo por el que pasan, al no saber nada de sus familiares.