El panorama en Estados Unidos cada día luce más negro. Y es que, además de estar luchando contra la pandemia del coronavirus, las plagas que ponen en riesgo sus ecosistemas parecen no tener fin.
Hace unas semanas nos enteramos de la llegada del "avispón asesino" al país norteamericano. Ahora, a las autoridades de Georgia les preocupa la inusual presencia de otro animal: el lagarto argentino o suramericano.
Se trata de un reptil de, aproximadamente, un metro de largo, que es capaz de devorar casi cualquier cosa y que se ha establecido en los condados de Toombs y Tattnall.
Su dieta varía: desde animales pequeños y huevos de reptiles en peligro de extinción, hasta frutas, verduras e incluso saltamontes, informó el Departamento de Recursos Naturales de Georgia. Además, pueden llegar a comerse los huevos de gallina y pavo, y el alimeto para mascotas.
Se trata de una especie invasiva que, por sus características y peculiar dieta, pone en peligro a los animales protegidos de la región, y por ello mismo, a los ecosistemas.
En Georgia está permitido tenerlos como mascotas, pero se prohíbe su liberación en la naturaleza. Las autoridades pidieron a la población informar sobre cualquier avistamiento de estos reptiles a los agentes del Departamento de Recursos Naturales, ya sea que estén vivos o muertos.
Al ser una especie invasora, los pobladores tienen permitido matar a los lagartos, si se los encuentran, siempre y cuando se hallen en propiedad privada.