Luego de que el pasado mes de junio Islandia suspendiera temporalmente la caza de ballenas, esta semana el gobierno anunció la reanudación de dicha actividad, aunque bajo condiciones más estrictas.
Recordar que el inicio de la temporada había sido aplazado debido a un informe crítico sobre la compatbilidad de esta práctica con las leyes de bienestar animal, el cual ha generado un intenso debate acerca del tema en el país europeo, uno de los pocos en los que todavía se permite la captura comercial de dicho cetáceo.
Sin embargo, tras analizar los resultados de un grupo especializado, el Ministerio de Alimentación y Pesca de Islandia llegó a la conclusión de que los métodos de caza pueden mejorarse desde el punto de vista del bienestar animal.
Por este motivo, próximamente emitirá una nueva regulación, incluyendo requisitos más detallados y estrictos para el equipamiento y estrategias de caza, así como una mayor supervisión, misma que permanecerá vigente hasta finales de 2023.
“Será importante evaluar la situación una vez que termine la temporada de caza de ballenas”, declaró la primera ministra finlandesa, Katrín Jakobsdóttir.