La Universidad de Cambridge, en Reino Unido, acaba de dar el último gran golpe en la investigación con células madre.
Y es que los expertos de esta prestigiosa universidad desarrollaron un modelo vivo de embrión de ratón sintético, con tejidos cardiacos que laten y una especie de cerebro.
Para llegar a este resultado, el grupo de científicos liderado por la profesora Magdalena Zernicka-Goetz imitó los procesos naturales guiando los tres tipos de células madre que influyen en el desarrollo temprano de los mamíferos hasta el momento en que comienzan a interactuar.
Al inducir la expresión de un conjunto concreto de genes y crear un entorno único para sus interacciones, se logró que las células madres “se comunicaran” entre sí.
“Nuestro modelo de embrión de ratón no sólo desarrolla un cerebro, sino también un corazón que late y todos los componentes que conforman el cuerpo. Es increíble que hayamos llegado tan lejos”, comentó Zernicka-Goetz.
“Esta ha sido la meta de nuestra comunidad durante años y el principal objetivo de nuestro trabajo a lo largo de una década”, destacó la catedrática de Desarrollo de Mamíferos y Biología de Células Madre.
Ahora, con base en estos resultados, los científicos de Cambridge esperan reparar y desarrollar órganos humanos “sintéticos” para trasplantes en un futuro no muy lejano.
“Hay mucha gente en el mundo que espera durante años un trasplante de órganos. Lo que hace que nuestro trabajo sea tan emocionante es que los conocimientos que se deriven de él podrían utilizarse para cultivar órganos humanos `sintéticos´ para salvar miles de vidas”, concluyó Zernicka-Goetz.