El cambio climático sigue siendo uno de los principales problemas del planeta y afecta a cada vez más especies.
La más reciente es el ornitorrinco, ese singular animalito con pico de pato y cola de castor, quien está a un paso de la extinción a causa del desarrollo urbano y las fuertes sequías en Australia y Tasmania.
La situación es tan grave que, según un estudio del Centro de Estudios de los Ecosistemas de la Universidad de Nueva Gales del Sur (UNSW), la población de esta especie podría reducirse hasta en un 66 por ciento en 50 años.
De acuerdo con el reporte, las condiciones del clima, la excesiva tala de árboles y la fragmentación de diques son las principales amenazas para estos animales.
Sin embargo, salvo por el estado de Australia del Sur, ninguna de las jurisdicciones del país incluyen al ornitorrinco como una especie en peligro.
Por su parte, Richard Kingsford, el director del Centro, explicó que otros factores que han disminuido la población son:
"Las presas que frenan sus movimeintos, la agricultura que destruye sus madrigueras, los equipos para pescar, las trampas para crustáceos y especies invasoras como los zorros".
Esta terrible situación podría significar que en un periodo relativamente corto, uno de los mamíferos más primitivos e interesantes del planeta pronto podría dejar de existir.