Con el objetivo de tratar a las mascotas afectadas por las fuertes inundaciones acontecidas en Valencia hace más de una semana, un grupo de veterinarios decidió instalar una clínica veterinaria improvisada en Paiporta, uno de los municipios cercanos considerados “zona cero”.
Y es que los efectos derivados de la gota fría o DANA generaron lodo contaminado, el cual ha provocado que los animales domésticos contraigan infecciones de consideración, debido a la presencia de bacterias como la leptospira.
“Aquellos ejemplares que no tengan una buena pauta de vacunación corren un alto riesgo de enfermarse por beber agua contaminada. Por eso, queremos recalcar que es mejor casi que los animales estén paseando en las azoteas de los edificios que por las calles”, precisó Marián Sancho, una de las veterinarias que atiende el puesto, ubicado al interior de un antiguo almacén.
El local, explicó la doctora, está en mal estado y no puede cerrarse con llave, por lo que los medicamentos y suministros se retiran al anochecer.
“Los animales son atendidos de forma gratuita y aquellos que necesiten de una atención integral son llevados a una clínica especializada universitaria en el centro de Valencia”, agregó.