A la sombra de la personalidad eufórica de los perros domésticos, los gatos quedan eclipsados. Muchas veces, también, porque las personas pretenden que éstos se comporten con la misma actitud servil y cariñosa que tienen otras mascotas.
Sin embargo, y aunque no lo demuestren, los gatos buscan a sus dueños humanos para sentirse más tranquilos y seguros cuando se sienten estresados. Así lo dio a conocer un reciente estudio por parte de la Universidad de Oregon, el cual demostró que los felinos de casa no solo establecen relaciones afectivas profundas con sus familias humanas, sino que también los consideran como “sus guardianes”.
Para llegar a dicha conclusión, los investigadores se dieron a la tarea de medir el apego emocional que los mininos tienen hacia los humanos con los que conviven. Según la autora principal del estudio, Krystin Vitale, este vínculo se establece con más profundidad entre el animal y su cuidador principal.
“El apego es un comportamiento biológicamente relevante. Nuestro estudio indica que cuando los gatos viven en un estado de dependencia con un humano, ese comportamiento de apego es flexible y la mayoría de los gatos usan a los dueños como una fuente de consuelo”.
La investigación tomó una muestra de gatos domésticos para una “prueba de base segura”, comúnmente utilizada en bebés humanos y perros. Primero se les puso durante unos minutos con sus dueños más cercanos en un cuarto. Luego, se les dejó solos por dos minutos, para finalmente traer de regreso a sus cuidadores.
Los resultados indicaron que, cuando sus cuidadores volvieron a la habitación tras un corto periodo a solas, los mininos se mostraron “notablemente menos estresados ante el entorno desconocido”. Al verlos, inmediatamente corrieron hacia sus humanos en busca de calma y consuelo. Finalmente, después de pasar algunos momentos a su lado, volvían a explorar el cuarto de manera más tranquila.
Seis meses después, la misma prueba se realizó una vez más con el objetivo de eliminar sospechas en cuanto a los cambios de su conducta. No obstante, los gatos se comportaron exactamente de la misma manera: aliviados de ver a sus dueños regresar por ellos.
“Es probable que los gatos inseguros corran y se escondan o parezcan actuar distantes. Sin embargo, estoy casi segura que la mayoría de éstos buscan a sus familias como una fuente de seguridad y apoyo emocional”, finalizó Vitale.