En los últimos trescientos años se ha intensificado la cría y selección de razas puras de perros, un proceso que también lleva consigo un grave riesgo. Y es que con el paso del tiempo, muchas de estas razas se han vuelto endogámicas, con una diversidad genética pequeña y, por tanto, las probabilidades de heredar ciertas enfermedades aumenta considerablemente.
Un equipo de investigadores de la Universidad de Uppsala, en Suecia, llevó a cabo recientemente una investigación para analizar si estas prácticas de reproducción han aumentado el número de variantes que causan enfermedades en los canes. Para ello, se dieron a la tarea de secuenciar los genomas completos de una veintena de perros de ocho razas comunes como Beagles, Pastores alemanes y Golden Retriever´s.
Después de unas cuantas semanas de análisis, los resultados revelaron que el Cavalier King Charles Spaniel, una raza que ha experimentado un proceso de cría más intenso, es portadora de variantes genéticas peligrosas.
Algunas de las mutaciones están relacionadas, en concreto, con la enfermedad de la válvula mitral mixomatosa (MMVD). En este padecimiento cardiaco, la válvula mitral del corazón degenera y permite que la sangre se filtre desde el ventrículo izquierdo hacia la aurícula del mismo lado.
Los expertos identificaron dos variantes genéticas relacionadas con dicha enfermedad, las cuales parecen regular un gen que codifica una proteína común en el músculo cardiaco. Estos hallazgos ofrecen una posible explicación de por qué el Cavalier King tiene más posibilidades de desarrollar este padecimiento.