Actualmente, según múltiples censos, más de la mitad de la población mundial tiene una mascota en su hogar, especialmente perros. Sin embargo, hace aproximadamente 1,500 años, en el actual territorio del sur de la provincia de Mendoza, Argentina, existió un grupo de seres humanos que solía convivir con una especie de zorro, al cual lo consideraban como un buen compañero.
Así lo demostró un nuevo estudio realizado por investigadores del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas argentino (Conicet), y publicado en la revista Open Science.
En el artículo, los autores explican que a mediados de 1991 se realizó una excavación en el sitio denominado Cañada Seca-1, ahí se hallaron restos humanos y los de un animal, presuntamente un perro. No obstante, en el transcurso del presente año volvieron a analizarse las partes del ejemplar y gracias a los avances tecnológicos se pudo determinar que se trataba realmente de un Dusicyon avus, especie de mamífero nativo de América del Sur.
“Hoy día se le conoce como `zorro-lobo continental´, pero nadie sabe cómo lo llamaban los cazadores y recolectores de hace 1,500 años que habitaban el actual territorio de Mendoza”, precisa el doctor Francisco Prevosti, líder del estudio.
“Era un mamífero que habitó desde el Sur de Brasil hasta el sur de Argentina hace más de 400 años, pero, por causas desconocidas, sus poblaciones fueron desapareciendo, hasta extinguirse completamente. Resultaba muy similar a los zorros colorados contemporáneos, llegando a pesar 10 kilogramos”, explica.
Con base en la evidencia recopilada, los resultados del presente trabajo revelan que existió una buena interacción entre los humanos y aquel zorro. Incluso, se cree que compartían el tipo de alimentación y eran enterrados junto a aquellas personas más cercanas.