En la actualidad, las personas acostumbramos tener en casa aparatos realmente útiles para realizar diversas tareas, desde la cocina, para nuestro entretenimiento, u otros que simplemente ayudan a hacer nuestras vidas más fáciles, pues existen dispositivos capaces de hacer casi cualquier cosa que nos imaginemos.
Aunque los aparatos que tenemos en casa resultan de gran ayuda, la mayoría de ellos son desechados al completar su ciclo de uso, convirtiéndose así en severos contaminantes para el medio ambiente, pues la falta de conocimiento acerca de qué hacer con ellos, provoca que la mayoría de las personas los tire a la basura. Esto es incorrecto, ya que muchos de ellos son fabricados a partir de materiales y gases que resultan sumamente dañinos y riesgosos para el medio ambiente. Metales tóxicos, mercurio, zinc, plomo, arsénico, litio, cobre y muchos más, son algunos de los materiales con los que se producen celulares, laptops, tablets, televisiones, etcétera. Estas sustancias tóxicas, al no ser controladas, terminan desprendiéndose en el aire, agua y tierra, contaminando el planeta de modo irreversible. Entre los aparatos más contaminantes están los refrigeradores y los aires acondicionados.
Esta clase de electrodomésticos, y en general cualquier aparato que ya no sirva, no deben ser depositados entre la basura común, pues los desechos emitidos por estos no sólo dañan el medio ambiente, sino también la salud de las personas. El plomo y el arsénico son dos de los elementos más peligrosos para los seres humanos, pues causan intoxicaciones y hasta cáncer de piel; el envenenamiento por mercurio afecta los sistemas nervioso e inmunológico.
Por lo anterior, es importante saber cómo deshacerse de nuestros aparatos obsoletos, por ejemplo, llevándolos a algún centro de reciclaje especializado, es decir, uno donde sepan qué hacer y cómo desmantelarlos. Usualmente, los celulares, tablets y computadoras portátiles deben ser llevados al mismo lugar donde fueron adquiridos; desde allí serán transportados a los centros de reciclaje especializados. Si crees que es tiempo de cambiar de refrigerador u horno de microondas, primero ten en cuenta a dónde vas a llevar los que ya no sirven.
Y recuerda: si nos estás utilizando ningún aparato o electrodoméstico, es mejor apagarlos y desconectarlos para no gastar energía eléctrica de forma innecesaria.