La contaminación auditiva, provocada por el uso indiscriminado del automóvil, el ruido de las construcciones y de centros comerciales, representa una amenaza cada vez más cercana para la biodiversidad en el mundo, afirmó el investigador del Instituto de Biología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Lázaro Guevara López.
“Hay una contaminación auditiva extremadamente alta en las grandes ciudades del mundo y eso altera el comportamiento natural de las especies, las ponen en riesgo de no reproducirse y, por lo tanto, de extinguirse”, dijo a Xinhua el experto.
Según un informe de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), un millón de especies de animales y plantas, de los ocho millones conocidas, están amenazadas de extinción y podrían desaparecer en pocas décadas si no se toman medidas urgentes.
El biólogo explicó que el ruido es provocado por los seres humanos, especialmente, en las grandes urbes, pero también fuera de ellas, lo que puede crear barreras para que muchas especies se puedan comunicar, encontrar pareja, reproducirse y así conservar su especie.
La contaminación auditiva es un tema que aún no se ha investigado a fondo, es un elemento que puede causar un daño considerable a poblaciones de aves, insectos, algunos mamíferos, árboles y plantas endémicas.
“Las aves se comunican a través de los sonidos, algunos insectos también, de ahí la importancia de no invadir más sus hábitats y de crear conciencia entre la población en cuanto al uso del automóvil y la generación de sonidos extremadamente fuertes”, declaró.