La NASA hace años que insiste en que pronto se vendrá una nueva era de exploración espacial a fondo, con más expediciones tripuladas y con la Luna como uno de los grandes objetivos.
Por eso, una de las situaciones que los científicos en la Tierra quieren solucionar antes de regresar a pisar suelo lunar, es estandarizar el horario para nuestro satélite natural, estableciendo una suerte de hora oficial.
Hoy en día cada misión lunar utiliza su propia escala de tiempo que está vinculada, a través de sus manipuladores en la Tierra, al tiempo universal coordinado, o UTc, el estándar contra el cual se establecen los relojes del planeta. Pero este método es relativamente impreciso y las naves espaciales que exploran la Luna no sincronizan el tiempo entre sí.
Una primera dificultad es que los relojes en la Tierra y la Luna marcan naturalmente a diferentes velocidades, debido a los diferentes campos gravitacionales de los dos cuerpos.
En una publicación en Nature, el Centro Europeo de Investigación y Tecnología Espacial de la Agencia Espacial Europea (ESA) en Noordwijk, Países Bajos, están buscando una solución.
Las decisiones deben tomarse pronto, dice Patrizia Tavella, quien dirige el departamento de tiempo en la Oficina Internacional de Pesas y Medidas en Sèvres, Francia. Si no se establece una hora lunar oficial, las agencias espaciales y las empresas privadas presentarán sus propias soluciones, dice. «Es por eso que queremos levantar una alerta ahora, diciendo que trabajemos juntos para tomar una decisión común».
Los primeros pasos consisten en lo siguiente:
crear un sistema global de navegación por satélite (GNSS) dedicado para la Luna, similar a cómo el GPS y otras redes de navegación por satélite permiten el seguimiento preciso de la ubicación en la Tierra.
Otro tema a resolver es si los astronautas usarían el tiempo lunar universal en todas partes de la Luna. Aunque el tiempo lunar seguiría siendo la escala de tiempo oficial, sus usuarios podrían, como en la Tierra, querer compensarlo en zonas horarias que se vinculan con la posición del Sol en el cielo. Esta es menos una pregunta para los metrólogos y más una cuestión de convención. «Cuando alguien realmente vive allí en la Luna, creo que tiene sentido», dice.
La atracción gravitacional de la Luna es más débil que la de la Tierra, lo que significa que, para un observador en la Tierra, un reloj lunar funcionaría más rápido que uno de la Tierra. Un reloj lunar debería ganar alrededor de 56 microsegundos en 24 horas.
Definir un estándar lunar, con el que se comparan todos los relojes, implicará instalar al menos tres relojes maestros que marquen el ritmo natural de la Luna, y cuya salida se combine mediante un algoritmo para generar un reloj virtual más preciso.
Podrían decidir basar el tiempo lunar en UTC. En ese caso, este tiempo lunar virtual se sincronizaría regularmente con EL UTC terrestre.
Los metrólogos también tendrán que decidir en qué parte de la Luna colocar los relojes maestros. Al igual que en la Tierra, la altitud de los dispositivos afectará la velocidad de tictac. Los relojes podrían estar en órbita lunar o en la superficie.
La principal conclusión la entrega Jörg Hahn, un ingeniero que trabaja en el proyecto Moonlight de la ESA.
«Las misiones lunares también necesitarán un tiempo lunar oficial para cooperar y comunicarse», dice Hahn. «Todo esto tiene que remontarse a un tipo de referencia temporal, de lo contrario tienes caos y las cosas no funcionan juntas».
Fuente: es.digitaltrends.com