La crisis económica es inminente y eso podría disparar algunos delitos en el país, advirtió Semáforo Delictivo.
En un informe, subrayó que es urgente que el Gobierno federal cambie de actitud y, en conjunto con los estados y empresarios, diseñe un plan de contingencia integral y efectivo. De otra manera, alertó la organización, los indicadores delictivos podrían dispararse, en especial los delitos patrimoniales y probablemente algunos del crimen organizado.
"El efecto económico apenas empieza, se combina con la crisis petrolera y, sobre todo, con el ambiente adverso a la inversión nacional y extranjera que el Gobierno federal provocó desde el año pasado", señaló. "El cierre de empresas, el desempleo y la desesperación de la población más afectada podrían crear un escenario de violencia social inusitado".
Si el Gobierno no entiende que no debe golpear a las empresas ni acaparar recursos fiscales para dilapidarlos en proyectos absurdos y que no tienen lógica, añadió Semáforo Delictivo, no ha entendido nada sobre los riesgos que se avecinan.
"Son tiempos extraordinarios y si no hay respuesta desde el Gobierno federal, la sociedad y los gobiernos estatales tendrán que tomar otro tipo de decisiones para evitar una crisis mayor".
Ven repunte en homicidios
En su informe, Semáforo Delictivo alertó que en lo que va del año, los homicidios han tenido un repunte, a pesar de que otros delitos como el robo de autos y a negocios han decrecido.
Con 2 616 casos de homicidio y 3 mil víctimas de este delito, subrayó la organización, marzo fue "por mucho" el mes con mayor incidencia en los últimos 5 años.
"El 80% de estos homicidios corresponden a ejecuciones del crimen organizado, y eso nos indica que la lucha entre bandas y cárteles rivales no sólo no cesa, sino que se incrementa, a pesar de la emergencia sanitaria", apuntó. "Esto muestra que el mercado negro de drogas sigue su propia dinámica y la reducción de ingresos por la cuarentena ha exacerbado la lucha entre grupos delictivos".
Para Semáforo Delictivo, las ejecuciones no bajarán mientras el Estado no regule las drogas: "algo que la presente administración prometió con mucha insistencia en campaña, pero que no ha legislado. El primer trimestre del año acumula 8 585 víctimas de homicidios en 7 279 casos", agregó.