El presidente Andrés Manuel López Obrador argumentó que al no haber proceso electoral en marcha, él puede hablar sobre asuntos partidistas en sus conferencias matutinas sin violar la Constitución.
En dos impugnaciones ante el Tribunal Electoral, presentadas en la última semana, el mandatario insiste en que ejerce su libertad de expresión, la cual, considera, no puede ser “objeto de ninguna inquisición judicial o administrativa”, ni de “censura previa”.
Estos recursos impugnan las resoluciones de la Comisión de Quejas del INE del 13 y del 20 de junio, en las que le ordenaron no volver a hablar sobre el proceso electoral del 2024, de los procesos internos de los partidos ni de ningún aspirante a la Presidencia.
En sus recursos, AMLO afirma que sus dichos son producto de respuestas a la prensa y que el Tribunal Electoral ha dicho que las conferencias o entrevistas no pueden medirse igual, porque son respuestas “espontáneas”, no de un “guion predeterminado”.
“La respuesta y opinión del titular del Ejecutivo Federal no vulnera el principio de equidad en la contienda electoral del proceso electoral federal, ya que dicho procedimiento no ha iniciado en ninguna de sus etapas, no existen precandidatos o candidatos inscritos para contender por algún cargo público”.
“Las manifestaciones del presidente hacen referencia a procesos intrapartidiarios que de ninguna manera pueden constituir llamados a votar a favor o en contra de alguna fuerza política”, se argumenta.
“La autoridad responsable pretende erigirse en un ente censor de los servidores públicos. Llevó a cabo un análisis subjetivo y carente de racionalidad”, acusa.
Fuente: Reforma