Comunidades y pueblos indígenas de Oaxaca, Chihuahua, Campeche, San Luis Potosí, Chiapas, Jalisco, Michoacán y el Estado de México lanzaron hoy la Alianza por la Libre Determinación y la Autonomía (Aldea).
"Las reformas prometidas por la 4T para avanzar en el cumplimiento efectivo de los derechos indígenas siguen congeladas, mientras los megaproyectos avanzan, aun en tiempos de pandemia", criticaron, al dar a conocer su alianza.
"Es momento de poner alto a los atropellos en contra de las comunidades y de construir en serio una 'nueva relación entre los pueblos indígenas y el Estado, basada en la igualdad, el respeto y la no discriminación'".
La comunidad michoacana de Santa María Ostula, donde nacieron las autodefensas durante el sexenio de Felipe Calderón, y la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias-Policía Comunitaria (CRAC-PC), también conformada por civiles armados, pero en Guerrero, son parte de la Aldea, al igual que los Bienes Comunales de la Selva Lacandona, el Consejo Supremo Indígena de San Francisco Xochicuautla y la Coordinadora de Pueblos Unidos por el Cuidado y Defensa del Agua, entre otros. Los acompañan organizaciones civiles como Serapaz, Fundar, Oxfam México y la Fundación para el Debido Proceso.
"Vemos día con día a gobiernos, empresas y el crimen organizado atentar contra las estructuras tradicionales de toma de decisión, invadir los territorios con proyectos de muertes por medio de la violencia, la corrupción y falsas consultas", lanzaron, aunque evitaron nombrar alguno de los proyectos.
Al anunciar la creación de la Alianza, pidieron al presidente Andrés Manuel López Obrador derogar las distintas formas de despojo legal de los territorios indígenas, vigentes en las leyes energéticas y la Ley Minera, "así como promover una nueva Ley de Aguas, con apego a derecho y al respeto de los sistemas comunitarios; y una Ley de Prohibición de la Fracturación Hidráulica (fracking)".