El crecimiento de 6,2 % que tuvo en 2021 la economía de Latinoamérica, la región más golpeada por la pandemia, “no se va mantener”, advirtió este jueves en entrevista la secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina (Cepal), Alicia Bárcena.
Aunque el producto interior bruto (PIB) regional tuvo “un buen crecimiento” gracias a los “buenos precios” de las materias primas y a un repunte del comercio internacional, Bárcena apuntó que es una “paradoja porque no es un crecimiento que se pueda sostener”.
“El problema que nosotros vemos es que no es un crecimiento que se pueda mantener y eso es, la verdad, lo que más nos preocupa. Y por eso en 2022 vemos que hay una desaceleración muy importante”, declaró en videollamada.
La titular de la Cepal presentó en la Ciudad de México el “Balance Preliminar de las Economías de América Latina y el Caribe”, donde elevó su cálculo de crecimiento de 2021 a 6,2 % tras la estimación de 5,9 % hecha en agosto, pero bajó su pronóstico para 2022 a un 2,1 % de un 2,9 % previo.
La funcionaria internacional atribuyó la insostenibilidad del alto crecimiento en 2022 a factores externos, como la desaceleración de China y Estados Unidos, los principales socios comerciales de la región.
Pero también señaló problemas regionales como la inflación, que creció un 7,2 % en 2021 sin contar a Argentina, Venezuela, Haití y Surinam, y los históricos rezagos latinoamericanos en productividad, inversión y valor agregado en exportaciones.
Una región enferma
Latinoamérica ha sido la zona más afectada en términos económicos y sanitarios por la pandemia de Covid-19, que ha dejado cerca de 50 millones de casos y más de 1,5 millones de muertes en la región, con Brasil, México, Perú y Colombia y Argentina a la cabeza.
Bárcena comentó que la pandemia “evidenció las disparidades” en América Latina, como el hecho que en los 19 países latinoamericanos solo 61,5 % de la población cuenta con la vacunación completa anticovid por falta de acceso al fármaco, frente al casi 70 % de la Unión Europea (UE).
“Estamos afrontando un contexto de enorme incertidumbre, una gran disparidad y asimetría de cómo nuestra región, que forma parte de las economías emergentes, está respondiendo a la problemática que se está enfrentando de la pandemia y menor crecimiento”, alertó.