Para nadie es un secreto que México está lleno de cultura, tradiciones, gastronomía y uno que otro tesoro escondido.
Nuestro país oculta sitios donde reina la paz y la naturaleza que son poco conocidos por los ojos humanos, pero quien los encuentra sabe que ha llegado a un lugar especial.
Isla de Enmedio, en el estado de Veracruz, es un ejemplo claro de ello, pues resulta ideal para recargar energía en completa tranquilidad, mientras se disfruta de sus playas vírgenes.
Ubicado frente a las costas de la localidad Antón Lizardo, este espacio forma parte de un grupo de seis zonas de tierra firma y vegetación, la cual se encuentra en mar abierto.
En los alrededores es posible encontrar arrecifes coralinos y diversas especies marinas como la tortuga, que suele arribar a sus suaves costas para desovar. Incluso, hace no mucho tiempo se instaló un campamento especial con el propósito de protegerlas.
Pero más allá de gozar del clima tropical, arena blanca, imponente mar y aguas cristalinas, cientos de viajeros aprovechan su visita para encontrar nuevas experiencias con la naturaleza. Por este motivo, Isla de Enmedio, que pertenece al Parque Nacional de Sistema Arrecifal Veracruzano, ofrece distintas actividades, entre las que destaca bucear; hacer paddle, practicar surf; e incluso avistar toda la flora y fauna.
¡Ojo! Algo que se debe tomar muy en cuenta es que cada turista únicamente puede estar en ella durante 3 o 4 horas. Lo anterior con el objetivo de controlar el tiempo y la cantidad de personas, pues se trata de un ecosistema virgen; además, no es posible encontrar tiendas, hoteles de lujo ni restaurantes cerca, pura tranquilidad.
Para llegar a Isla de Enmedio se necesita tomar una embarcación desde Antón de Lizardo, el cual tarda alrededor de 30 minutos en llegar al destino. Una vez ahí, sólo los servicios de traslado están autorizados para ingresar.