En las altas montañas de San José del Pacífico, en la sierra de Oaxaca, se esconde un bosque de fantasía, un escenario típico de un cuento de hadas donde los frondosos árboles muestran el camino hacia las cabañas. Estamos hablando del Bosque de los Duendes y las Hadas.
En este mágico lugar reinan los cerros verdes, el frío y una neblina constante y escurridiza que llega hasta el último rincón.
Pero…¿a que se debe el nombre? Según los propietarios de las cabañas de el Bosque de los Duendes y Las Hadas, las bautizaron así porque muchas personas, incluidos los visitantes, juran haber visto a este tipo de seres mágicos en la zona, haciendo travesuras, apareciendo y desapareciendo en un parpadeo.
En cuanto a las cabañas, éstas cuentan con unos interiores llenos de colibríes coloridos, corazones, alebrijes y otros detalles que le otorgan personalidad propia a cada una de estas casas de madera pintadas y diseñadas con el único fin de ofrecer a los visitantes una experiencia única.
Las noches en uno de estos espacios tienen un precio desde los $750 pesos y el costo puede variar dependiendo el número de personas que deseen hospedarse.
Cabe mencionar que la decoración y las interesantes historias sobre seres fantásticos no son los únicos atractivos del lugar, ya que el Bosque de los Duendes y las Hadas tienen muchas otras actividades que ofrecer a sus visitantes.
Piedra del Duende: La Piedra del Duende es una roca salida de más de seis metros de altura. Debajo de ella se suelen organizar cenas románticas acompañadas de luces que decoran e iluminan el paisaje. Lo mejor de todo es que el menú puede ser al gusto de cada pareja y la decoración es 100% personalizada.
Temazcal: Los huéspedes de las cabañas son bienvenidos a participar en las distintas ceremonias de temazcal especialmente creadas para purificar el cuerpo y la mente mediante este baño tradicional.
Degustación mezcalera: Para los amantes del mezcal, este lugar organiza desgustaciones de mezcales tanto exóticos como artesanales, los cuales son encabezados por nada más y nada menos que el dueño de las cabañas, el señor Luis Zárate, quien además es experto de esta deliciosa bebida mexicana.
Recolección de hongos: El clima húmedo y la sombra de los árboles favorecen el crecimiento de hongos de muchas especies. Los hay de distintos colores, tamaños y tipos. Por este motivo se organizan recorridos guiados para recolectarlos; en el paseo, el guia enseña a diferenciar entre las especies comestibles, venenosas y hasta alucinógenas.
Senderismo de alta montaña: Hablando de recorridos, este lugar también organiza caminatas guiadas por el extenso bosque. Por lo regular, los paseos duran una hora, lo que hace que esta actividad sea perfecta para personas mayores o niños pequeños, además de que la ruta es de muy fácil acceso. Con un poco de suerte, los participantes podrían encontrarse con pájaros cantando y uno que otro armadillo salvaje.