Tras permanecer una hora encapsuladas por la policía a un costado de la estación del Metrobús Balderas, las feministas que se manifestaban fueron custodiadas hasta la entrada del Metro Niños Héroes.
Inicialmente las manifestantes se presentaron al exterior de la Fiscalía de la Ciudad de México para exigir justicia por el feminicidio de la joven Alexis, asesinada en Cancún, y el alto a la violencia contra las mujeres. De las instalaciones de esta dependencia, sustrajeron cajas con documentos que después quemaron.
Minutos más tarde, caminaron hasta la Avenida Balderas, donde las uniformadas con equipos antimotín las retuvieron. En este lapso de tiempo, las jóvenes y policías se enfrentaron a golpes y jaloneos. Mientras las encapuchadas lanzaban piedras en contra de las Ateneas, estas las rociaron con polvo de extintores.
La Fiscalía informó en un comunicado que los documentos sustraídos por las mujeres y que después abandonaron en la calle, fueron recogidos por personal de la institución: "Una vez que las mujeres se retiraron, personal de la FGJCDMX, tanto administrativo, como sustantivo, reintegró la documentación que se encontraba sobre la calle Gabriel Hernández al interior del inmueble, con la finalidad de reubicarla en su lugar de origen".