Ante el anuncio del retorno al color rojo del semáforo de riesgo epidemiológico, por el máximo riesgo de contagios de COVID-19 en el Estado de México, la medida, que aunque se avizoraba debido a las estadísticas de las últimas semanas, tomó por sorpresa a comercios y prestadores de servicios como el sector restaurantero, en el que miles de trabajadores se verán afectados.
Mauricio Massud Martínez, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) del Valle de Toluca, señaló que la temporada de fin de año representaba una esperanza de recuperación económica, pero con esta medida, aunque se les permitirá la venta a domicilio y para llevar, los trabajadores dejarán de percibir propinas.
Además, 70% de la planta productiva que ya había regresado a laboral, tendrá que volver a descansar durante el periodo del semáforo rojo; y aunque el nuevo cierre de actividades fue establecido hasta el 10 de enero, este plazo es incierto: “Estamos hablando de cerca de 200 mil personas que se tendrán que ir a descansar a sus casas”, dijo.
Asimismo, como lo ha comentado con anterioridad, las ventas a domicilio representan un mínimo de los ingresos, por lo que se perderá hasta 80% de estos: “La venta en mesas es la que genera el ingreso principal y adicional para meseros y parrilleros”, añadió.
Massud Martínez también señaló que hubo falta de sensibilidad por parte del Gobierno estatal, al no haberles informado con anterioridad sobre la decisión de retornar al semáforo rojo y al confinamiento, pues de esta forma tan premura también existe el riesgo de la pérdida de inventario, que en su mayoría se trata de productos perecederos.
“Con cinco, cuatro días de anticipación, nos hubieran dado la oportunidad de poder mover nuestros inventarios, que representan varios miles de pesos, que pudimos haber movido para darle algo más a nuestro personal. Eso es lo que lastimó”, expresó.
Finalmente, precisó que no están en contra de la medida y priorizar el tema de salud, por lo que acatarán puntualmente las disposiciones, “pero deben ser analizadas por cada uno de los sectores”, refirió.