A pesar de que dentro de plazas, centros comerciales y otros establecimientos se han implementado puntualmente las recomendaciones para inhibir el riesgo de contagios de COVID-19, mercados, tianguis semifijos y el comercio ambulante continúan siendo los puntos de mayor preocupación para las autoridades sanitarias, pues en ellos se congrega mayor cantidad de gente.
Victor Durán Mendieta, subdirector de Epidemiología del Instituto de Salud del estado de México (ISEM), añadió entre los anteriores al transporte público, terminales de autobuses y sitios de taxis porque “es donde la gente está menos sensibilizada y convencida del uso de cubrebocas”, expresó.
Aunque esta situación, especificó, viene desde que la entidad se encontraba en el color rojo del semáforo de riesgo, al reiniciarse más actividades en la etapa naranja, se vio una mayor movilidad, porque continuarán con trabajos y estrategias para sensibilizar a la población y siga las medidas de prevención, como usar cubrebocas, mantener sana distancia y lavarse las manos con frecuencia.
Recordó que es importante que adultos mayores, mujeres embarazadas, personas con VIH, cáncer o alguna enfermedad crónica se mantengan resguardados y eviten en lo posible acudir a espacios públicos, pues, insistió, son más vulnerables a presentar complicaciones en caso de contraer la nueva enfermedad.
El coordinador de Protección Civil y Bomberos, Hugo Espinosa Ramírez, también señaló que los tianguis representan un foco de alto riesgo de contagios; por ello, durante el mes de agosto, implementarán operativos especiales en estos, junto con la dirección de Desarrollo Económico, en los que se llevarán a cabo filtros sanitarios.
Explicó que cada fin de semana acudirán de forma aleatoria a distintos tianguis, y junto con los representantes de mesas directivas, que han recibido bien la propuesta, se habilitará un solo punto de entrada y salida para controlar la afluencia, dotar de gel antibacterial, tomar la temperatura a los visitantes y hacer entrega de cubrebocas.