Maurilio Hernández, presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) de la Legislatura local, reconoció que cabe la posibilidad de que los partidos Revolucionario Institucional (PRI) y Acción Nacional (PAN) se opongan a continuar los trabajos para la reforma integral a la Constitución local, sin embargo, advirtió que resultaría un error al contravenir una necesidad histórica, pues la sociedad, Poderes e instituciones se han apropiado del proceso de renovación al marco jurídico base en la entidad.
El también coordinador del grupo parlamentario de Morena recordó que en la actual Legislatura todos los grupos parlamentarios, incluidos el PRI y el PAN, acordaron la reforma constitucional, por lo que se entendería que la siguiente Legislatura que habrá de instalarse en septiembre ratificará el trabajo del Secretariado Técnico (Sectec) y garantizará que se continúe con el proceso parlamentario.
Si para estos momentos actores del PRI y del PAN se han pronunciado en contra, confió en que se trata de opiniones al aire, pues esta postura no es oficial porque ni siquiera han tomado protesta los nuevos diputados.
Además, Hernández destacó que los nuevos legisladores deben ser sensibles con las necesidades sociales, pues la sociedad civil está participando con gran entusiasmo en el parlamento abierto.
Si el procedimiento se lleva a las diferencias ideológicas y políticas, indicó, estamos dispuestos a dirimirlas allí, “pero la reforma ya es de la sociedad mexiquense y de todas las instancias de la función pública, por lo que sería delicada una posición contraria a lo que la historia nos marca”.
Los trabajos para concretar la nueva Constitución del Estado de México, enfatizó, no pueden interrumpirse en la próxima Legislatura, pues ya es un derecho ciudadano acceder a una nueva normatividad legal y constitucional.
De igual manera, destacó que el parlamento abierto es plural, total y absolutamente incluyente, de tal manera que su resultado será igualmente diverso. Bajo estas consideraciones, propuso que mejor todos los actores políticos trabajen en el propósito de crear un buen producto social como entramado jurídico, pues será construido a través de una deliberación que no será de pasillo, de café, ni de políticos.
La intención, planteó, es que la nueva Constitución no sea abstracta, sino concreta, práctica, que dé resultados e involucre a toda la sociedad en el ámbito de cada responsabilidad.
Estas precisiones se realizaron después de la inauguración del parlamento abierto que permitirá a organizaciones sociales y ciudadanos mexiquenses participar en la construcción de la reforma integral de la Constitución Política local, con la promoción, argumentación y defensa de sus propuestas.
En este marco, Mauricio Valdés, coordinador general de los trabajos, indicó que el material recibido hasta ahora es mucho, pues además de las propuestas por separado, un ciudadano incluso presentó un proyecto de Carta Magna integral; también se pronunció por no legislar al vapor.
Afirmó que el Sectec no lleva una Constitución bajo el brazo, pero sí un diseño a partir de la revisión realizada a las iniciativas ciudadanas.
Rubén Islas, también integrante del Secretariado, planteó que el parlamento abierto es la etapa más importante del proceso de renovación de la Constitución, e indicó que se tiene previsto concluir el ejercicio el 16 de julio: se trabajará en las mesas las semanas que van del 5 al 9 de julio y del 11 al 16 de julio con sesiones de las nueve comisiones, cada una sesionará un día, y el 16 se celebrará sesión plenaria para desahogar todos los dictámenes.
Para abordar los temas polémicos, como los matrimonios igualitarios, la interrupción legal del embarazo, el consumo lúdico de la cannabis, por ejemplo, explicó que se tomó la decisión de definirlos por consenso o disenso (no habrá votos a favor ni en contra), pues la finalidad es permitir que la sociedad se exprese; los argumentos en favor y en contra serán presentados mediante un informe final a los diputados, para que sean ellos quienes conozcan y valoren el sentir social.