Después de que personal médico del Instituto Materno Infantil del Estado de México, hiciera un llamado al Secretario de Salud, Gabriel O'shea Cuevas, para atender la crisis por la que atraviesan, ya que desde el inicio de la pandemia no han recibido el equipo de protección para atender a pacientes positivos a COVID-19, la directora de dicho nosocomio, Mónica Pérez Santin, negó la falta del equipo de seguridad necesarios, además de que resaltó en lo que va de la pandemia del total del total de trabajadores que son mil 700 sólo 89 han dado positivo a esta enfermedad, mismos que fueron diagnosticados a través de las 214 pruebas que estuvieron disponibles para médicos, enfermeras y demás empleados.
"Nosotros tenemos un módulo de medicina laboral que ninguna otra institución tiene al interior para sus trabajadores, en este módulo se implementó para quien así lo necesitará y se le brindará el acompañamiento necesario, ya que sabemos que muchos de los pacientes son asintomáticos y esto podría contagiar al resto del personal y cómo tenemos que cuidar a todos, pues solicitamos las 214 pruebas".
Respecto al camillero que dió positivo, Pérez Santin, comentó que fue diagnosticado en el mismo hospital desde el 26 de julio, sin embargo, desconocen porque empeoró su salud, ya que se le brindaron las incapacidades necesarias para su resguardo".
"Desgraciadamente tuvo muy mala evolución, pero su prueba COVID-19 fue desde el 26 de julio y se tomó al interior de las instalaciones cómo parte del tamizaje".
Finalmente detalló, que el equipo de protección consta de guantes, caretas, goggles, cubrebocas, gel antibacterial y cubrebocas, los cuales se se adquirieron a través de un presupuesto extraordinario que autorizó la Secretaría de Salud y el Gobierno estatal.