Por enésima ocasión, la Legislatura mexiquense dio entrada a las iniciativas de matrimonios igualitarios e Interrupción Legal del Embarazo (ILE). La primera promovida por Morena y por el Partido de la Revolución Democrática (PRD), la segunda por el sol azteca; ambas con un rezago de dictamen desde hace cuatro Congresos locales.
A nombre de Morena, la diputada Anaís Burgos Hernández planteó reformar el Código Civil del Estado de México para eliminar los candados que disponen que el matrimonio es sólo entre un hombre y una mujer con fines de procreación, que el concubinato también se reconoce a las uniones hombre-mujer, y eliminar la bisexualidad como causal de nulidad del matrimonio.
Burgos Hernández expuso que el matrimonio es un acto jurídico cuya finalidad no se puede reducir a la procreación, pues tiene mayor importancia, se trata de una institución de solidaridad mutua entre personas adultas que deciden un proyecto de vida común con consecuencias jurídicas.
Además, planteó, tiene que ver con la dignidad humana que actualmente se ve obstaculizada por prejuicios y discriminación, lo que limita el goce de derechos de la comunidad LGBTTTI+, a pesar de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) ha reconocido la viabilidad del matrimonio entre personas del mismo sexo y limitarlo es anticonstitucional.
La figura, expuso, ha evolucionado en el país. El 11 de marzo de 2010 se celebró el primer matrimonio igualitario en la Ciudad de México (CDMX) y derivado de varios amparos ya procede en 24 entidades federativas; incluso en el Estado de México, en 2016 se reformó la ley para prohibir la discriminación por orientación sexual.
“Sabemos que es un tema controversial que genera posturas divergentes; no estamos obligados a pensar igual, pero es necesario privilegiar la apertura, el respeto, no la confrontación ideológica; avanzar en una sociedad de derechos, acabar con los prejuicios… Nuestro deber es legislar en favor de los derechos de todos los ciudadanos por igual para crear una sociedad libre y equitativa”, planteó.
Por su parte, la perredista Élida Castelán recordó que no hay un único modelo de familia ideal, lo importante, dijo, es tutelar la protección a la familia, sea cual sea su forma; e indicó que ya no existe justificación jurídica para desconocer este derecho y privilegiar la exclusión, prejuicio o segregación.
Apeló a que Morena sea congruente y, ahora sí, apruebe la reforma, aunque en la pasada Legislatura Morena, aliados y el sol azteca incluso tenían la mayoría calificada.
El PRD también propuso modificar los Códigos Administrativo, Penal y Civil del Estado de México para despenalizar el aborto y permitir la ILE antes de las 12 semanas de gestación, como un derecho sexual, reproductivo y a la salud de las mujeres mexiquenses que también ha reconocido la Corte.
Las propuestas fueron turnadas a comisiones para su análisis y dictamen.