Maurilio Hernández, presidente de la Junta de Coordinación Política en la Legislatura local, denunció que la Procuraduría de Protección al Ambiente del Estado de México (Propaem) tolera a quienes se han enriquecido con las 18 mil toneladas diarias de basura que se disponen en la entidad, descuidando su responsabilidad en detrimento de la salud pública y el medio ambiente.
Al participar en el Foro “Hacia una Gestión Metropolitana de los Residuos Sólidos” que forma parte de los trabajos para la reforma constitucional, el además coordinador del grupo parlamentario de Morena advirtió que la disposición final de residuos sólidos ya es un gravísimo problema que en el caso del Estado de México representa 18 mil toneladas al día que se suman a las que provienen de la Ciudad de México.
“Cada vez estamos más inmovilizados para poder tomar decisiones, porque la basura genera muchos intereses económicos; si es bien manejada y procesada, genera riqueza, pero el tema es que la genera para unos cuantos, para quienes tienen los controles, prohijado por autoridades que no cumplen con su responsabilidad, me refiero a la Propaem”, acusó.
El problema, indicó, ya es grave en materia de salud pública, tiene un costo para la economía de las familias, para la hacienda pública, de los municipios, del estado y de la federación, por lo que se requiere de la conciencia de todos los involucrados.
En la zona oriente de la entidad, expuso, entran no menos de 10 mil toneladas al día; en un 40% del territorio mexiquense, manifestó, hay tiraderos a cielo abierto, sobre todo en zonas del norte y sur, la región de los volcanes y en el Valle de Toluca, lo que representa un generador de contaminación del subsuelo porque los lixiviados no tienen el tratamiento adecuado, y falta una cultura de separación de residuos orgánicos e inorgánicos.
El legislador ejemplificó que el tiradero de Chiconautla es uno de los principales focos de contaminación por lixiviados que contaminan los mantos freáticos de Acolman que abastecen a los pozos de la región, mientras el tiradero Tepotzotlán arrastra desde hace cuatro años juicios entre prestadores de servicios y recepción de la basura en busca del control, mientras los vecinos reclaman su clausura para sanearlo y rehabilitar el medio ambiente; también, indicó, se tiene un problema de límites territoriales porque ya invadió Teoloyucan.
En el oriente de la entidad, expuso, se están haciendo esfuerzos con el ayuntamiento de Chalco para que se permita un depósito para toda la región, aunque problemas burocráticos, de intereses económicos y de intereses políticos no permiten tomar las mejores decisiones.
El Bordo de Xochiaca, en los límites territoriales de Nezahualcóyotl, planteó, recibe los residuos sólidos de la Cdmx y federales de la autopista Peñón-Texcoco, lleva décadas operando y no se ha podido resolver su problemática; por el contrario, avanza cada día más, y “¡Ay de aquel que quiera acercarse!”.
Por estas razones Maurilio Hernández celebró la convocatoria de la Comisión de Asuntos Metropolitanos para que se busque una solución en la que deben participar los tres niveles de gobierno y los poderes del estado.