Para proteger a la humanidad de una helada, las arañas comenzaron a tejer un gran cobertor que abarcó toda la ciudad. Con este acontecimiento nació el libro Arañas, de la docente y escritora de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx), Berenice Reyes Almazán (Bere Reyal), y que formará parte del catálogo de Librerías Gandhi y El Sótano.
Editado por Libro Objeto, Arañas está conformado por 28 cuentos, ilustrados por el artista local Gerardo Pichardo, que a través de distintas especies de arácnidos -que son las protagonistas de las historias-, Reyes Almazán tiene como objetivo que las personas que lo lean puedan ver a estos artrópodos desde otra perspectiva.
“Las personas que han leído mi libro me dicen ‘sabes Bere, desde que leí tu libro ahora lo pienso dos veces antes de matar una araña’. Eso es, desde mi perspectiva, una forma de salvar vidas desde un cuento y es algo que no me esperaba”, explicó.
Para Bere Reyal la literatura es un viaje a la imaginación, es conocer otras historias y otras realidades, además de jugar con los límites de lo que es verdadero y la imaginación. Por ello, en su libro hace un símil -a través de metáforas- entre la vida humana y la vida de los arácnidos desde el terror y la fantasía.
“Yo veo en las arañas magia. Me parecen seres fascinantes. Este libro está dedicado a las arañas y desde el inicio tiene una sentencia contundente. Hay un cuento dentro del libro que narra la travesía de una araña que bien podría hacer lo mismo que nosotros y simplemente la pisamos porque es insignificante”, abundó.
En este sentido, destacó que las arañas son animales con los que coexistimos diariamente y una forma de reconocer su vida es respetar su existencia y evitar que el terror ciegue el respeto a la naturaleza.
Para Reyes Almazán la publicación de este libro significa cumplir un sueño que parece ser inalcanzable y el hecho de tenerlo en sus manos es una experiencia inigualable porque es un aporte al mundo porque tener un libro es trabajo de muchas personas, no solo de la o el autor.
Escribir para visibilizar problemáticas sociales
Berenice Reyal comenzó su carrera como escritora desde una corta edad; sin embargo, ella identifica que fue hasta los 17 años cuando escribió de manera profesional, cuando ingresó a la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Máxima Casa de Estudios mexiquense.
A lo largo de su estancia en la Facultad cursó la materia de Creación Literaria, la cual le permitió conocer que la escritura podía ser más que un gusto personal, que existían técnicas y que hay mucho dentro de esta disciplina.
“Cuando yo cursé esta materia, la doctora Guadalupe Carillo, quien impartía la clase, le gustaba mucho lo que hacía y su retroalimentación me dió confianza, me dió guía. Esa clase me permitió conocer que hay técnicas, lo que me gustó mucho y tengo que decir que mi formación universitaria influyó mucho en dedicarme a la escritura”, abundó.
En este mismo sentido, explicó que cuando comenzó a escribir fue a través de las cosas que se encontraban a su alrededor. Ella imaginaba qué había detrás de cada escena y comenzaban a escribir, por lo que sus primeras historias se centraban en sucesos cotidianos.
Actualmente, sus historias se centran en la equidad y la inclusión, enfocándose principalmente en las mujeres; a través de la poesía difunde la importancia de la denuncia, mientras que con la narrativa trata de jugar con la mente del lector para que se cuestione si los acontecimientos descritos sucedieron o no. Abundó que este tipo de temáticas son actuales y atraviesan a toda la sociedad, por ello es necesario visualizarlas desde todos los ámbitos posibles.
“Es bien sabido que cuando uno escribe el texto deja de ser tuyo y le pertenece a nuestros lectores, a lo largo de la narrativa y de la poesía, para que desde la literatura se comparta desde otro ángulo y otra perspectiva este tipo de problemáticas”, mencionó.
Abrir puertas para futuros escritores y escritoras
Como escritora, Berenice Reyal considera que es necesario abrir puertas, ya que desde su experiencia la han ayudado muchas personas a través de la literatura, sobre todo, destaca el papel de las mujeres que la han impulsado a escribir.
“Yo me acuerdo que en la secundaria una maestra me dió el gusto por el Español y no lo solté. Posteriormente, en Prepa 1, la maestra Lulú era quien daba clases de español y literatura y ella tuvo mucho que ver en mi formación. Después, cuando entre a la Facultad, la doctora Guadalupe Carillo. Son mujeres que de alguna manera me enseñaron a escribir, a perfeccionar y encontrar mis talentos y es algo que reconozco y admiro mucho”, enfatizó.
En este mismo sentido, reconoció que tristemente las mujeres escritoras han quedado en un segundo plano de la historia, por lo que es necesario crear redes de mujeres que permitan apoyar a personas con talento.
Por ello y como reconocimiento al apoyo que ella ha recibido por parte de mujeres y profesores que la han impulsado a lo largo de su carrera, fundó el Taller de Apreciación y Creación Literaria y el Taller de Poesía “Sor Juana Inés de la Cruz”, ambos, en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, en donde mujeres, hombres y miembros de la comunidad LGBTTTIQ+ han encontrado en la literatura un medio para expresarse.
“Es muy bonito ver que existen muchos chicos y chicas interesados en la escritura y que se acerquen a ella por gusto, ya que muchas veces cursamos las asignaturas porque forman parte del plan curricular, pero es asombroso poder sacar de eso, que es obligación, algo que nos llena de manera personal y profesional”, abundó.
Durante su carrera como escritora ha sido acreedora al Premio Nacional de Cuento del Encuentro de Talentos Universitarios en 2014 y 2015, el Premio Municipal de la Juventud en la Categoría de Poesía en 2017 y ganó el Concurso Nacional para Escritoras Mexicanas en 2019.