Pese a la suspensión de actividades durante diez días y a la no celebración de sesiones plenarias al menos un par de semanas durante el actual periodo ordinario, Maurilio Hernández, presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), aclaró que la Legislatura local concluirá el periodo el 30 de abril, como la ley lo establece, con la posibilidad de celebrar, de ser necesario, periodos extraordinarios.
"Los asuntos que no se hayan ventilado se pueden atender perfectamente en dos meses de receso, mayo y junio, ya que en julio iniciará el próximo periodo", indicó, al ser cuestionado sobre la posibilidad de algún periodo extraordinario de sesiones para reponer las sesiones ordinarias no celebradas.
No obstante, aclaró que si bien es importante cumplir con el trabajo parlamentario, también lo es atender las recomendaciones sanitarias por la contingencia de Covid-19.
"Lo haremos en función de las necesidades, primero, pero también de las condiciones sanitarias que prevalezcan en el estado", manifestó.
Hernández González afirmó que, pese a la suspensión y contingencia, la Legislatura local no ha parado sus actividades, pues finalmente son esenciales, "pero sí hemos administrado la participación del personal, las participaciones de los diputados en las sesiones deliberantes y los trabajos de comisión", expuso.
En lo que resta del actual periodo ordinario, indicó, los legisladores tratarán de solventar algunos compromisos que por términos de ley no se pueden pasar.
Por ejemplo, expuso, durante la sesión plenaria programada para la semana próxima, se estima votar en el pleno la reforma electoral recién concretada en comisiones con la que se atrasa el inicio de los periodos electorales locales y la reforma al artículo 5 de la Constitución local para armonizarla con la reforma federal en materia educativa, por lo cual se prevé una próxima reunión de las Comisiones de Educación y Gobernación para dictaminar y pasar la resolución al pleno.