De 15 a 20 por ciento de los nacimientos en el mundo registran bajo peso al nacer, mientras que en América Latina el porcentaje es de 9 por ciento y en México de 8.3 por ciento, sin olvidar el sub registro, es decir, que no todos los niños nacen en hospitales donde se puede tomar nota de su peso y talla, por ejemplo, los que nacen con parteras, sostuvo la investigadora Elena Flores Guillén, al participar en las actividades académicas que con motivo del Día de las y los Nutriólogos llevó a cabo el Centro Universitario Amecameca de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx).
Precisó que de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), tiene bajo peso al nacer todo aquel neonato a término con 2.5 kilogramos o menos y que éste puede ser un factor determinante para algunas enfermedades crónicas no trasmisibles.
Refirió diversos estudios que hacen referencia a que las enfermedades de los adultos fueron inducidas por la desnutrición fetal, por ejemplo, obesidad, diabetes e hipertensión.
En este contexto, afirmó que también son fundamentales los primeros años de vida, principalmente procesos como la lactancia y la ablactación, pues existen estudios que refieren que los patrones de crecimiento posnatal son factores que potencialmente pueden inducir enfermedades.
La catedrática e investigadora de la Facultad de Ciencias de la Nutrición y Alimentos de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas aseguró que el peso al nacimiento es un factor importante para edades futuras adultas.
Con respecto al origen del bajo peso al nacer, indicó que entre los posibles factores están las edades extremas de la madre. “Así, el embarazo adolescente sigue siendo un factor determinante para el peso al nacimiento y sabemos que hoy en día muchas mujeres esperan para ser madres hasta los 35-38 años, lo cual favorece las condiciones de peso al nacimiento”.
De igual manera, abundó Elena Flores Guillén, está la desnutrición materna, todo un círculo vicioso, ya que, al tener madres con talla baja, con bajo peso, es altamente probable que tengamos niños con bajo peso.
También, dijo, son determinantes para esta condición factores como el alcoholismo, el tabaquismo y la drogadicción. Además, hay que cuidar la ganancia de peso, por lo cual siempre se recomienda que una mujer embarazada tenga un seguimiento durante los nueve meses de gestación para que haya un adecuado crecimiento y desarrollo del producto.
Asimismo, detalló, los periodos intergenésicos cortos, es decir, entre un embarazo y otro, favorecen esta condición al nacimiento; también se ha demostrado que la baja escolaridad y, en consecuencia, la pobreza, está asociada con esta condición.