Lo encontraron en medio del desierto de Buffalo, al sur de los Estados Unidos. Corría el año de 1987, y los paleontólogos se asombraron por las dimensiones del esqueleto, pues con al menos 12 metros de largo, “Stan”, como lo apodaron para facilitar futuras referencias, podría ser uno de los Tyrannosaurus rex más completos que se habían exhumado hasta el momento.
Inmediatamente, los restos del enorme T.Rex fueron transportados a Nueva York. Ahí, “Stan” pasaría unos cuantos años entre pruebas de laboratorio y exhibiciones en diversos museos de la ciudad.
Sin embargo, no fue hasta octubre de 2021 que el dinosaurio haría nuevamente historia, toda vez que un comprador anónimo lo adquiriera gracias a una subasta millonaria, la cual batió algunos récords mundiales. Y es que por primera vez, un esqueleto de dinosaurio había sido vendido por 31.8 millones de dólares.
De acuerdo con Christie´s, el nuevo dueño de “Stan” era oriundo de Arabia Saudita, y tenía planes para llevárselo a Abu Dhabi, capital de su país.
Ahora, cinco meses después, la promesa se hizo realidad y el T.Rex fue transportado hacia los Emiratos Árabes Unidos. El cargamento, según la casa de subastas, pesó alrededor de 5.6 toneladas, esto considerando los 188 huesos que conforman el esqueleto completo.
Naturalmente, “Stan” tuvo que desarmarse para poder atravesar los mares hasta su nuevo hogar: el nuevo Museo de Historia Natural de Abu Dhabi, donde a partir de ahora, estará expuesto en una sala para él solo.
De esta manera, los restos del ejemplar pasarán a ser parte de una lujosa colección, ya que el espacio museístico, ubicado en Saadiyat Island, uno de los distritos más adinerados de todo el país, alberga meteoritos, fósiles incompletos y otras piezas invaluables.