El Museo de Historia Natural de Florida comunicó que uno de sus investigadores, Chase Kimmel, encontró una abeja de calamintha azul, el 9 de marzo.
Kimmel, quien trabaja en el campo en un proyecto no relacionado, estaba instalando un condominio de abejas cerca de una especie de flor llamada calamina de Ashe, que es una de las principales fuentes de alimento de las abejas, cuando notó a la extraña criatura cerca de él y tomó una serie de fotografías para confirmar la identidad de la abeja azul.
La abeja de calamintha azul había sido incluida en la lista del Plan de Acción de Vida Silvestre del Estado de Florida en su categoría de mayor necesidad de conservación, y solo se había observado en cuatro pequeñas áreas del centro de Florida, con un total de 25 kilómetros cuadrados.
Este descubrimiento marca un gran avance, a medida que los científicos luchan por aprender más sobre la abeja azul.