A lo largo de su vida, Michael Kelly se ha dedicado a investigar las diferentes especies marinas que habitan en el continente oceánico.
Como ecofisiólogo de la Universidad de Australia Occidental, una interrogante siempre rondaba por su cabeza: ¿cómo duermen los tiburones? Y es que hasta hace unos meses, había muy poca información sobre los hábitos de sueño de estos depredadores, a tal grado de que muchos creían que no podían dormir.
Por este motivo, Kelly reunió a un equipo de colegas de la misma institución para documentar el proceso; pero más allá del hecho de cómo duermen los tiburones, al especialista le interesaba entender cómo es que el sueño afecta a sus procesos metabólicos, pues según su hipótesis, esto podría influir en la manera en que regulan su energía vital.
Para ello, los expertos decidieron enfocar su investigación en los tiburones toro (Carcharhinus leucas), ya que estos ejemplares se caracterizan por entrar en un estado de reposo para conservar energía.
Luego de observar a estos tiburones durante varias semanas, Kelly y sus colegas descubrieron que estos animales nunca pueden dejar de moverse, ya que de otra manera, no podrían aprovechar el oxígeno del agua por medio de sus branquias. De hecho, por esta razón la creencia popular indicaba que los tiburones no dormían nunca.
Entonces…¿los tiburones duermen? Sí, pero no como otras especies en el mar, ya que lo hacen en intervalos diferentes y a lo largo de las 24 horas del día, con el propósito de conservar su energía y seguir nadando.
En lugar de acomodarse en un espacio oscuro y cómodo para descansar, los tiburones se “desactivan” temporalmente; y dicho periodo de descanso puede durar hasta 5 minutos.
A pesar de que no está completamente seguro de que todas las especies de tiburones duerman de la misma manera, Kelly asegura que existe una amplia posibilidad de que así sea, más que nada porque la mayoría de estos depredadores necesitan moverse para respirar.