Este fin de semana, el Santuario Ostok, en Sinaloa, fue sede de uno de los eventos más increíbles del año en cuanto al mundo animal se refiere. Y es que “Big Boy” y “Bireki”, una pareja de elefantes asiáticos (Elephas maximus), celebraron su boda.
Así como lo lees. En el marco del segundo aniversario de este recinto, los ejemplares contrajeron nupcias, en un evento muy significativo para conservar especies en peligro de extinción, pues ellos fueron rescatados gracias a la reforma de la Ley General de Vida Silvestre en 2015, que prohibió el uso de animales en los circos.
“Estos dos elefantes tienen una nueva oportunidad de vida, un gran recomenzar con este enlace”, comentó Ernesto Zazueta, presidente del Santuario Ostok.
“Lo que nosotros les ofrecemos aquí a `Big Boy´y `Bireki´, y a alrededor de otros 500 ejemplares que hemos rescatado, es una vida con lo mejor de dos mundos: estarán rodeados de naturaleza, pero con los cuidados humanos que cada uno necesita”, recalcó.
A la par de la boda, también se llevó a cabo la reubicación de felinos rescatados de la fundación Black Jaguar White Tiger a su nuevo hábitat dentro de la superficie de Ostok.
“(los felinos) Han pasado por un largo proceso de recuperación clínica y ahora podrán disfrutar de un entorno adecuado para su bienestar”, indicó Zazueta.