Los animales herbívoros, independientemente de si son mamíferos, aves o reptiles, enfrentan un mayor riesgo de extinción que los carnívoros u omnívoros, reveló recientemente un estudio publicado en la revista Science Advances.
Dicha investigación señala que el riesgo es particularmente alto para los reptiles y los animales de gran tamaño, como las tortugas y los elefantes.
Los autores del estudio afirman que los depredadores a menudo son percibidos como los más vulnerables debido a sus grandes territorios, así como a la lenta tasa de crecimiento de sus poblaciones: “Hemos establecido que el nivel trófico y el tamaño son importantes factores en el riesgo de extinción, El nivel trófico es el lugar que ocupan los animales en la cadena alimenticia, de ahí que los depredadores estén en la parte superior”, explican.
Los datos recopilados por el grupo de investigadores analizan, tanto el pasado lejano (final del periodo Pleistoceno, hace aproximadamente 11 000 años), como el pasado reciente (500 años) y el presente, arrojando conclusiones similares.
Alrededor de una cuarta parte de las especies herbívoras estudiadas se encuentran actualmente en peligro de extinción. Asimismo, el 100% de los reptiles herbívoros de hábitats marinos están amenazados con entrar en este estado.
Sin embargo, existen algunas excepciones, como las especies piscívoras (animales que se alimentan de peces) y las carroñeras (animales que se alimentan de cadáveres), ya que estas también muestran un nivel de riesgo de extinción relativamente alto. De hecho, los depredadores que habitan en los océanos se encuentran muy amenazados.
Finalmente, los investigadores lanzaron una hipótesis: las especies invasoras, ya sean ratas, insectos o plantas, afectan desproporcionadamente a los reptiles herbívoros, esto en comparación con los omnívoros y los depredadores.