A casi siete meses de haber sido presentada por los diputados Roy Torres, de Movimiento Ciudadano, y Ana Villagrán, del Partido Acción Nacional, el Congreso de la Ciudad de México aprobó la Ley de Protección a los Animales, mejor conocida como “Ley Maple”, la cual pretende regular y proteger a las mascotas llevadas a pensiones, campamentos, veterinarias, hospitales, escuelas de adiestramiento o con paseadores.
El dictamen, generado por la Comisión de Bienestar Animal, fue aprobado en sesión ordinaria, registrando 48 votos a favor, cero en contra y cero abstenciones.
En ese sentido, la reforma propone que todas las alcaldías de la capital mexicana regulen el funcionamiento de los lugares antes mencionados, con el propósito de que tanto la autoridad como el establecimiento tengan una constante comunicación y así éste último brinde sus servicios de manera adecuada.
De igual manera, se establece que será considerado como crueldad y maltrato animal el abandono de mascotas en pensiones y escuelas de adiestramiento, así como la muerte de ejemplares por negligencia. Tal y como sucedió con “Maple”, un perro raza Shiba Inu que a mediados del año pasado cayó víctima de la irresponsabilidad de los encargados del campamento canino “You Can Dog Training”, quienes lo hallaron muerto y, sin consultar a sus propietarios, decidieron cremarlo.
Cabe mencionar que además de su reciente aprobación, la Ley de Protección a los Animales sufrió algunas actualizaciones, entre las que destacan la creación de un padrón oficial de prestadores de servicios, como escuelas y pensiones, para que el dueño esté seguro de que el cuidador está registrado para hacerlo; las alcaldías deberán regular y supervisar los lugares, asegurándose de que éstos cumplan con requisitos mínimos como tener un veterinario disponible 24/7; y tanto paseadores como terapistas y entrenadores deberán tramitar un permiso a fin de llevar a cabo sus actividades.