Muchas veces se ha pensado o tenido la creencia que dormir con las mascotas podría empeorar la calidad del sueño, debido a que éstas hacen ruido, se mueven y ocupan mucho espacio; sin embargo, un nuevo estudio realizado por miembros del Laboratorio de Psicología de Salud Pública Pediátrica (PPHP) ha revelado que dormir a lado de estos animales de compañía podría mejorar la calidad del descanso, en especial los niños y jóvenes.
La investigación publicada en la revista especializada Sleep Health, se llevó a cabo gracias a la participación de 188 menores de entre 11 y 17 años, quienes contestaron una serie de cuestionarios sobre sus rutinas de sueño, llevaron unas pulseras especiales que medían la calidad y duración del descanso nocturno, además de un dispositivo de polisomnografía, que registra las ondas cerebrales mediante un electroencefalograma.
Una de esas preguntas, dentro del apartado de la higiene del sueño, incluía si ellos solían dormir con alguna de sus mascotas, y uno de cada tres (34.6%) respondió que sí. Estos resultados llamaron la atención de los investigadores, quienes empezaron a estudiar el cómo afectaba dicha compañía nocturna al descanso de los niños y jóvenes. Para ello, decidieron dividir a los participantes en tres grupos, de acuerdo a cuántas veces dormían con sus mascotas (nunca, a veces, o con frecuencia), y posteriormente, los compararon en relación con diferentes variables del sueño.
Con el paso de los días, el grupo de científicos no encontró ningún impacto negativo en el sueño de los niños a la hora de dormir junto con sus mascotas. Por el contrario, hallaron pruebas sólidas de que los niños que dormían cerca de sus animales de compañía tuvieron una mejor calidad de sueño, especialmente los chicos mayores.
De acuerdo con Jennifer McGrath, una de las principales autoras del estudio, esto podría deberse a que los niños tienen un fuerte vínculo con sus mascotas y ellos los consideran como una especie de amigo cercano; por ello, se sienten de lo más cómodos durmiendo a su lado.