Si tu perro acostumbra convivir durante mucho tiempo con niños pequeños, es importante que tomes en cuenta ciertas reglas básicas para que la convivencia entre ellos se dé en armonía.
A continuación te presentamos cinco reglas que te ayudarán a lograr una relación basada en el respeto y seguridad entre tu amada mascota y los pequeños del hogar.
1. Conciencia
Una de las cosas más importantes es tener una total conciencia de que todas las razas de perros, sin excepción, son capaces de morder. Los canes pueden morder por un sinnúmero de razones, si se dan las circunstancias que lo provoquen. Lo ideal es tomar mucho en cuenta esta situación y tener las precauciones necesarias.
2. Supervisión continua
Esta es una de las reglas más importantes a seguir y poco y nada tiene que ver con la confianza que le tengas a tu mascota. Siempre se debe supervisar la relación entre perros y niños, siendo un adulto el encargado de echarles un vistazo constantemente.
3. Contar con un espacio propio
Es fundamental que tu perro cuente con un espacio propio dentro del hogar en el cual pueda ir a “refugiarse” cuando no tenga ganas de convivir, o simplemente quiera estar tranquilo, cómodo y sin ser molestado.
4. No forzar la interacción
Recuerda: cada perro tiene una personalidad distinta. Habrá algunos que sean muy felices al jugar con los niños, mientras que otros que prefieran sólo hacerles compañía por un rato. Si te percatas de que a tu mascota no le gusta jugar, no fuerces la relación entre el pequeño y el perro; recuerda que el objetivo es lograr la convivencia con respeto y no que sean los mejores compañeros de juego.
5. Si tu perro muestra problemas de comportamiento, consulta a un experto
Si has notado que tu mascota se muestra agresiva hacia algún conocido o miembro de tu familia, lo ideal es que consultes a un experto en comportamiento canino, es decir, un etólogo. Verás que con su ayuda, en conjunto con el amor de tu familia, tu canino resolverá cualquier problema.