El estero de San José del Cabo, una de las reservas ecológicas más importantes de Baja California Sur, se encuentra en peligro de desaparecer, al igual que algunas especies que la habitan.
Así lo afirman miembros de la organización BWT Change The World, quienes buscan unir esfuerzos para evitar la desaparición de esta zona, la cual sirve como refugio de miles de aves migrantes.
“Cada año, el estero se va reduciendo más y más. Si no tomamos las acciones pertinentes, en poco tiempo no habrá nada de profundidad, lo que a la postre conllevará la extinción de muchas especies, sobre todo aves”, explica Carlos Ruiz, coordinador de la reserva ecológica.
Actualmente, el estero de San José del Cabo cuenta con una extensión de aproximadamente 50 hectáreas y es la única laguna costera de aguadulce de esta zona. Esta mezcla que hace con el agua salada del mar permite que exista mucha vegetación a su alrededor.
Por si fuera poco, dicha combinación de agua salada y dulce también actúa como una especie de regulador climático entre el desierto y el mar. De hecho, esta es la razón principal del por qué tiene una temperatura tan cálida.
Entre las problemáticas que afectan a este lugar, Ruiz destaca cuatro: el carrizo gigante, que va ganando espacio al que se tiene originalmente; la lucha contra el pino salado, una especie invasora que por su mismo tipo de actividad reseca los mantos freáticos; el manto de la virgen, una planta que cubre tanto a las demás que no les permite respirar adecuadamente; y por último está el lirio que, a partir de las lluvias, genera suelo duro y va quitando profundidad.
Por el momento, junto con la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), se están creando acciones; sin embargo, el experto pide más apoyo de la sociedad y de otras organizaciones para salvar la reserva.